Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Crónicas 30, 20-27

20 Y oyó Yahveh a Ezequías y dejó salvo al pueblo.

21 Los israelitas que estaban en Jerusalén celebraron la fiesta de los
Ázimos por siete días con gran alegría; mientras los levitas y los sacerdotes
alababan a Yahveh todos los días con todas sus fuerzas.

22 Ezequías habló al corazón de todos los levitas que tenían perfecto
conocimiento de Yahveh. Comieron durante los siete días las víctimas de la
solemnidad, sacrificando sacrificios de comunión y alabando a Yahveh, el
Dios de sus padres.

23 Toda la asamblea resolvió celebrar la solemnidad por otros siete
días, y la celebraron con júbilo siete días más.

24 Porque Ezequías, rey de Judá, había reservado para toda la
asamblea mil novillos y 7.000 ovejas. Los jefes, por su parte, habían
reservado para la asamblea mil novillos y 10.000 ovejas, pues ya se habían
santificado muchos sacerdotes.

25 Toda la asamblea de Judá, los sacerdotes y los levitas y también
toda la asamblea que había venido de Israel y los forasteros venidos de la
tierra de Israel, lo mismo que los que habitaban en Judá, se
llenaron de
alegría.

26 Hubo gran gozo en Jerusalén; porque desde los días de Salomón,
hijo de David, rey de Israel, no se había hecho cosa semejante en Jerusalén.

27 Después se levantaron los sacerdotes y los levitas, y bendijeron al
pueblo; y fue oída su voz, y su oración penetró en el cielo, su santa morada.